Entre nosotros, los productores, la palabra «sostenibilidad» a menudo puede sonar como una exigencia burocrática más o un costo adicional. Pero la verdad es que las prácticas de acuicultura sostenible son, en realidad, el pilar para una operación más eficiente, resiliente y, en última instancia, más rentable. El productor moderno no adopta estas prácticas solo para proteger el medio ambiente, sino porque entiende que un negocio que no se preocupa por el futuro no tiene futuro.
Hablemos de cómo podemos aplicar la sostenibilidad en el día a día de nuestra producción, ya sea en la camaronicultura o en la piscicultura, transformando los desafíos en oportunidades.
El agua es el corazón de nuestra producción. Por ello, la gestión consciente es la base de todo. Reducir el recambio de agua en los estanques, adoptar sistemas de recirculación (RAS) cuando sea posible y, principalmente, mantener un control riguroso de los parámetros de calidad del agua son pasos esenciales. Un monitoreo constante del pH, oxígeno disuelto, amonio y nitrito es lo que nos permite evitar problemas y usar el agua de forma eficiente. Un sistema como Despesca se convierte en una herramienta indispensable aquí, registrando y analizando estos datos para optimizar el manejo y minimizar el desperdicio.
Tratar el agua que sale de nuestros estanques antes de devolverla al ambiente es una práctica sostenible que demuestra nuestra responsabilidad. Tecnologías como los tanques de decantación o incluso la adopción de sistemas de biofloc no solo reducen el impacto ambiental, sino que también pueden reutilizar nutrientes para la producción. Es un ciclo virtuoso donde lo que sería un residuo se transforma en una nueva oportunidad.
El alimento es uno de los mayores costos de la producción. Un manejo sostenible de granjas camaroneras pasa directamente por el uso de alimentos de alta calidad, de proveedores que también se preocupan por el origen de sus insumos, y, principalmente, por una alimentación precisa. Sabemos que el exceso de alimento no solo contamina el agua, sino que también es dinero tirado a la basura. El monitoreo riguroso del consumo y el ajuste de las tasas de alimentación con base en el peso y el crecimiento de los animales son prácticas que benefician el medio ambiente y nuestra caja. Con la ayuda de un sistema de gestión, podemos registrar la cantidad de alimento aplicado y el rendimiento de nuestro lote, garantizando la máxima eficiencia.
Una granja que enfrenta brotes de enfermedades con frecuencia no es sostenible. Por eso, invertir en bioseguridad en granjas camaroneras y de peces es una práctica fundamental. Esto implica la elección de postlarvas y alevines de calidad, el control de entrada de visitantes y equipos, y el mantenimiento de un ambiente sanitariamente seguro. Una población de animales sanos crece mejor, demanda menos recursos y garantiza un ciclo de producción exitoso.
La energía que usamos para bombas, aireadores y otros equipos impacta tanto en nuestros costos operativos como en la huella de carbono de nuestra producción. La búsqueda de equipos más eficientes y, cuando sea viable, la adopción de fuentes de energía renovable, como la solar, son tendencias que ya están transformando el sector, resultando en un ahorro a largo plazo y un negocio más verde.
Adherirse a certificaciones reconocidas en el mercado (como las de BAP o ASC) es la forma más sólida de probar al consumidor y a los compradores que nuestra granja sigue las mejores prácticas sostenibles de camaronicultura. Estas certificaciones abren las puertas de mercados premium y valoran nuestro producto, justificando un precio más alto y garantizando un mejor retorno por nuestro esfuerzo.
En resumen, la acuicultura sostenible es un conjunto de prácticas que, cuando se aplican correctamente, hacen nuestra producción más eficiente, más segura y más rentable. Es nuestra manera de garantizar no solo la prosperidad de hoy, sino la viabilidad de nuestro negocio por muchas, muchas generaciones. Es el tipo de gestión inteligente que todo productor serio en nuestra región de Ceará debería buscar.